México reportó un déficit en su balanza comercial de 252.5 millones de dólares en octubre de 2023, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) el 27 de noviembre1. Este resultado se debió a un menor crecimiento de las exportaciones respecto a las importaciones, que se vieron impulsadas por la reactivación de la demanda interna y el aumento de los precios internacionales de los bienes intermedios2.
Las exportaciones de México sumaron 51,973.7 millones de dólares en octubre, lo que representó un incremento anual de 25.4%, mientras que las importaciones ascendieron a 52,226.2 millones de dólares, con un aumento de 28.9%1. Dentro de las exportaciones, destacaron las no petroleras, que crecieron 27.1%, sobre todo las manufactureras, que se expandieron 28.4%, impulsadas por el sector automotriz, que registró un alza de 35.1%1. Las exportaciones petroleras, en cambio, disminuyeron 4.8% en valor y 15.6% en volumen, debido a la menor producción y cotización del crudo mexicano1.
Por tipo de importación, las de bienes de consumo aumentaron 40.9%, las de bienes de uso intermedio 28.1% y las de bienes de capital 23.9%1. Estos datos reflejan una mayor demanda de productos finales por parte de los hogares y las empresas, así como una mayor inversión en maquinaria y equipo para la producción2.
A pesar del déficit registrado en octubre, México mantiene un saldo positivo en su balanza comercial en el acumulado de enero a octubre de 2023, con un superávit de 25,895.9 millones de dólares1. Este resultado se explica por el dinamismo de las exportaciones mexicanas, que se han beneficiado de la recuperación de la economía de Estados Unidos, su principal socio comercial, así como de la entrada en vigor del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) en julio de 2020, que ha fortalecido la integración y la competitividad de la región norteamericana23.
Además, México ha diversificado sus mercados de destino y de origen, buscando nuevas oportunidades de negocio con países como China, Corea del Sur, Costa Rica y el Reino Unido, con los que ha firmado o negociado acuerdos comerciales234. Sin embargo, el comercio exterior de México también ha enfrentado algunos obstáculos que han afectado su desempeño, como la crisis sanitaria, las tensiones comerciales entre las principales potencias, la escasez de insumos y transporte, y los conflictos laborales y ambientales en el marco del T-MEC23 .
Ante este panorama, el gobierno mexicano ha implementado algunas medidas para apoyar al sector exportador, como la ampliación de líneas de crédito, la simplificación de trámites aduanales, la inversión en infraestructura portuaria y ferroviaria, y la defensa de los derechos laborales y ambientales en el marco del T-MEC1 . Asimismo, el sector privado ha buscado adaptarse a las nuevas condiciones del mercado, innovando en sus procesos, productos y servicios, y aprovechando las ventajas del comercio electrónico y el nearshoring23.
En conclusión, México ha logrado consolidarse como un líder en comercio exterior en tiempos de crisis, gracias a su capacidad de resiliencia, diversificación y competitividad. Sin embargo, también enfrenta importantes retos que requieren de una mayor coordinación entre los actores públicos y privados, así como de una visión estratégica de largo plazo que le permita aprovechar las oportunidades y enfrentar los desafíos que presenta el escenario internacional.